Triste noticia: falleció el Padre Peppino.

Giuseppe Pulcinelli

1939-2010

El día 7 de Febrero a las 7,00 AM (hora italiana) regresó a la Casa del Padre el R.P. Peppino Pulcinelli (70) en Viterbo (Italia) en la casa de cuidados intensivos “Villa Rosa”. Había nacido el 30-4-1939 y fue ordenado sacerdote el 1-4-1967.

Luego de muchos meses de sobrellevar una enfermedad terminal, la cual siempre aceptó desde la voluntad de Dios, entregó serenamente su alma al Creador manteniendo hasta último momento su habitual sonrisa.

Pasó la mayor parte de sus años como sacerdote y en el servicio misional en América Latina. De una manera especial en su querido “Chile” que arraigó profundamente en su corazón y en su vida. Se sentía totalmente identificado con su gente, su cultura y tradiciones. Fue un gran impulsor en la casa de niños especiales en “Batuco” el Hogar San Ricardo. Su amor y dedicación por los niños especiales fue el motivo de entrega de toda su vida. Realizó una recopilación de los mensajes de Juan Pablo II dirigido a los limitados mentales cuyo título de publicación es “Juan Pablo II y las sobras preciosas”, trabajo realizado cuando era Director del Departamento de Catequesis especial en Santiago de Chile.

En la Provincia “Cruz del Sur” (Argentina, Chile y Paraguay) ocupó el cargo de Maestro de novicios en Luján y luego fue elegido Superior Provincial para el trienio 2003-2006. Pasó un período de tiempo en la comunidad de Pergamino y últimamente como Superior en la comunidad de Tapiales Hogar.

Dio siempre un lugar preponderante a la presencia y colaboración de los laicos de acuerdo al espíritu del Concilio Vaticano II, fomentando la formación del Movimiento Laical Guanelliano (MLG) y de los Cooperadores Guanellianos.
Desde su espíritu intrépido de celo apostólico y misionero impulsó, nuevamente, la presencia de una comunidad religiosa estable en Orán – Salta – para la atención del NOA (La Rioja, Tucumán, etc). Guardó como un anhelo, que por diversos motivos no pudo realizarse, el que la Congregación tuviera una presencia física en Bolivia (Santa Cruz de la Sierra) y en Perú (Tacna).

Su ejemplo de vida y de confianza en la Divina Providencia es el gran testimonio que nos legó, así como su trato amable y suave para todas las personas en una total actitud de servicio guanelliano.

Oramos por el eterno descanso de su alma y pedimos la resignación cristiana para todos sus familiares.

"Qué bello es vivir y morir bajo el auspicio de la Providencia".
(Beato Luis Guanella)

Fuente: http://jovenguanelliano.blogspot.com